Un nuevo tema de debate surgió en un medio chino, en donde se habla acerca del anime y la decadencia que este ha tenido a lo largo de los años. Si bien el anime siempre ha sido visto como uno de los símbolos más emblemáticos culturalmente hablando de Japón, este sin duda se destaca entre la animación gracias a su estilo artístico y el impacto que este ha generado sobre otras obras.
Antecedentes en el anime
En la década de 1980 y hasta finales de la década de 1990, el anime logró superar la calidad de las producciones anteriores, es por eso que las obras nacidas en esta época son reconocidas por su alta calidad. Esto gracias a que los estilos que implementaban eran muy diversificados y comparando a la industria en ese entonces, el nivel que manejaban era único.
Es por eso que mucha gente al hablar de animación realizada en Japón piensa en Hayao Miyazaki, el aclamado director que se dio a conocer por obras tales como Tenkuu no Shiro Laputa y Kaze Tachinu, las cuales son reconocidas mundialmente.
Así también, Mizaki es uno de los animadores y directores más longevos en la animación japonesa y ha marcado un hito como figura representativa de la misma. Aunque también aborda temas como la posguerra y fantasía, temas que son de cultura popular en todo el mundo y no únicamente en Japón.
El trabajo de Mizaki no solo se centra en temas generales, ya que logra jugar con las psique de sus espectadores, en donde estos se sienten atraídos por el ambiente y el espacio-tiempo que las películas de Ghibli retratan, películas que independientemente de la edad o época logran idear una figura natural que expresa emociones reales en sus personajes.
Uno de los factores decisivos que proyecta Mizaki es la empatía en su audiencia, la cual se ve reflejada en los personajes dentro de sus películas, en donde a pesar de ser escenarios fantasiosos en donde aparecen leyendas, youkai, y dioses, el núcleo de la historia siempre gira alrededor de un significado realista.
La animación japonesa actual
Luego de hablar sobre Ghibli y Hayao Miyazaki, factores importantes en el desarrollo de la animación japonesa, muchas personas se preguntan si aparte de Hayao Miyazaki hay otros autores igual de importantes e influyentes mundialmente. Ante esto, otros autores que se pueden destacar son Isao Takahata, Mamoru Oshii, Yoshiyuki Tomino, Katsuhiro Otomo, Yoshikazu Yasuhiko y Kaiji Kawaguchi.
Considerados como la generación que vivió su juventud en las décadas de 1960 y 1970, experimentando este auge en el movimiento social luego de la guerra, representando sus experiencias en obras de animación japonesa. Muchas personas los consideran como los responsables de la edad de oro en la animación de Japón.
Pero en estos últimos años, la industria del anime se ha vuelto más comercial, y aunque esto no esté mal, en gran medida la dirección del anime últimamente es enfocada a ser comercializada. Trayendo obras como Kimetsu no Yaiba, Jujutsu Kaisen y Ousama Ranking, obras en donde se ve claramente un patrón de homogeneización y una disminución en la imaginación literaria.
Y como menciona Mamoru Oshii, Kimetsu no Yaiba es una de las nuevas joyas en el manga, en donde se muestran paneles con alta calidad y detalle, es innegable reconocer su éxito tanto dentro como fuera de Japón, aunque esto no le quita que los escenarios, personajes y en sí su historia sea repetitiva.
Esto gracias a que la historia base de una obra se enfrenta a una inmensa gama de personajes que muchas veces hemos visto, pasando también por la selección que da el mercado y en donde se estereotipan personajes que no traen mucho riesgo para ser escritos y son fácilmente comprendidos por la audiencia.
Se podría decir que el mercado mismo se encarga de volver repetitivo un tema, así como sus escenarios y volverlos una venta fácil, finalmente consiguiendo que tanto los temas como los personajes y los escenarios se estandaricen si quieren conseguir un alto número de ventas.
Para finalizar, ¿El anime a día de hoy es arte o negocio?, uno de los principales problemas que enfrenta la industria del anime a día de hoy, si bien la gente está en busca de poder equilibrar ambos factores, esto será decisivo para el futuro de la industria del anime.
