Sin lugar a dudas Ijiranaide! Nagatoro-San o también conocido como “Don´t toy with me, miss Nagatoro” fue uno de los animes más comentados del año. Entre el amor y odio que la serie recibió y la incertidumbre del futuro de la franquicia al ver las bajas ventas del blue-ray, hoy nos hemos despertado con la noticia de la confirmación de una segunda temporada.
Muy buenas a todos, yo soy Rush y hoy les traigo un análisis sin spoilers de que paso luego de la primera temporada y que expectativas podemos tener con respecto a esta segunda temporada.
La historia abarcada
La historia de Nagatoro en el anime abarca hasta el capítulo número 43 del manga. Cubriendo la totalidad del arco de la feria estudiantil, se nos presenta un cierre acorde a la historia. La relación entre ella y el senpai quedó en un muy buen punto para continuar desarrollándolos, teniendo momentos divertidos como las palabras de la presidenta sobre las obras del senpai.
Pero actualmente el manga se encuentra en el número 93, y vaya si las cosas han cambiado. Nagatoro pasó de ser un manga de comedia ecchi/estudiantil a una comedia romántica un poco más seria. La progresión de los personajes en la obra se puede notar bastante fácilmente.
Nagatoro y la evolución de su obra
Y es que el manga de Nagatoro nos enseñó una evolución de los personajes realmente interesantes. Y ese mérito de Nanashi (es decir, el mangaka de la obra) se debe a como centra su obra únicamente en los protagonistas. Esto ha permitido que la relación entre Nagatoro y su senpai avance exponencialmente, además de sentirse como algo natural, fluido e interesante.
La obra no se siente lenta, y si bien suele caer en muchos clichés de las obras románticas, es una obra que se puede comenzar a ver con otros ojos. La seriedad que toma la historia luego de los hechos ocurridos en el arco de la feria estudiantil va escalando hasta no parecer la obra que nos encontramos en un inicio.
En un principio la fórmula era: Nagatoro yendo a molestar al senpai y este cayendo en sus provocaciones. Y así se repetía capítulo a capítulo con pequeños avances en su relación de día a día. Pero a medida que ambos van involucrándose más el uno con el otro nos encontramos con una realidad distinta. Hasta el punto en el que nos encontramos actualmente en el manga, el cual contiene una fórmula totalmente distinta que en el principio.
Conclusiones
Sinceramente, Nagatoro fue uno de los animes que más disfruté esta temporada. No tengo reparo alguno en decirlo. Lo que me atrajo en un principio fue como logró llamar la atención en torno a la polémica actitud de Nagatoro con el senpai, es decir el uso del bullying como detonante de la trama.
Dejando de lado el principio de la obra, esta fue bastante disfrutable y a comparación de otras comedias de este estilo se me hizo bastante entretenida. El anime no es perfecto pero nos deja con momentos realmente bonitos aunque con otros bastantes surrealistas.
Pero desde un punto de vista meramente subjetivo, la primera temporada solo nos muestra una imagen algo burda de lo que es la obra en sí. Y no porque la adaptación sea mala, sino que es corta y justamente termina en cuanto la relación entre Nagatoro y senpai avanza a pasos agigantados.
Mi recomendación personal es que le den una oportunidad al manga. Por suerte la editorial Ivrea estará serializando el manga en los próximos meses en Argentina bajo el título “No me jodas, Nagatoro” y en España como “No me rayes, Nagatoro” . Y si son de aquellas personas que prefieren esperar pues entonces ya saben qué esperar de la próxima temporada de Nagatoro.
Si no has visto aún la primera temporada pues puedes mirarla legalmente por Crunchyroll
Eso ha sido todo de mi parte, y les pregunto a ustedes ¿Les ha gustado la primera temporada de Nagatoro? ¿Cómo se tomaron la noticia de la nueva temporada? ¿Podrá el senpai dejar de ser tan senpai?