Después de la cancelación del estado de emergencia en la región de Kansai la semana pasada, el primer ministro japonés Shinzo Abe anunció en una conferencia de prensa el 25 de mayo que el gobierno japonés, siguiendo el consejo del consejo asesor y el grupo especial de coronavirus, fue lo último de las declaraciones sobre el estado de emergencia ahora se levantan en la región de la capital de Tokio (que incluye las prefecturas de la metrópoli de Tokio , Chiba , Kanagawa y Saitama ) y la isla de Hokkaido. El estado de emergencia se extendió originalmente al 31 de mayo, lo que lo convierte en un levantamiento temprano.
Tokio ya había planeado reabrir parcialmente el 25 de mayo, con la apertura de algunos grandes almacenes y la reanudación del trabajo de algunas empresas, bajo nuevas condiciones. El gobernador de Tokio, Yuriko Koike, anunció una estrategia dividirá en tres etapas para flexibilizar las restricciones en la capital japonesa, con el primer paso, ahora en vigencia, que permitirá la reapertura de las bibliotecas y museos si tienen medidas de seguridad, los restaurantes pidieron cerrar ahora a las 10 PM, en lugar de las 8 PM, y se permitirán eventos, siempre y cuando tengan un límite de 50 personas, incluidos los miembros del personal. Las escuelas dirigidas por el Gobierno Metropolitano de Tokio también están programadas para reanudar las clases, aunque con mucha vigilancia, durante todo el día y el tamaño de las clases es limitado.
Se establecerá un nuevo sistema para Tokio para combatir el virus llamado ‘Alerta de Tokio‘, donde si el número de nuevos contagiados confirmadas por coronavirus supera los 50, o si la mitad de los nuevos contagios son imposibles de rastrear, existe la posibilidad de declarar un nuevo estado de emergencia.
