Metallic Child es un interesante Roguelike que nos recuerda en cierta medida a la franquicia Mega Man y tiene sus correspondientes elementos que hacen distinguir a este título.
Nota: Para este artículo jugamos la versión para Nintendo Switch
¡Mega Man se convirtió en una waifu!
En Metallic Child conoceremos a una chica llamada Rona, quien en realidad es un robot al estilo de Maga Man, que se encuentra con daños críticos en una estación especial donde los robots se han vuelto locos. Es aquí donde aparece el jugador y deberá controlar a Rona para sortear cada uno de los retos que guarda la estación espacial.
Aunque queda señalar que en nuestro viaje también nos encontraremos con otros chicos robots, a los que también deberemos hacer frente para evitar que este movimiento rebelde escale y se convierta en una amenaza que podría extinguir la raza humana al estrellar la estación espacial contra la tierra.
Hablemos del gameplay
En nuestra base deberemos seleccionar la misión que queramos jugar, y en cada una de ellas deberemos completar cierta fases para al final encontrarnos con otro chico robot, que funciona como jefe, y repetir el ciclo hasta completar el juego.
Sin duda alguna podría sonar algo simplón, pero por fortuna podremos conseguir nuevas armas o artefactos en cada misión que añaden un gran dinamismo y ofrecen muchas posibilidades de juego, de hecho algunas de estas armas rinden tributo a franquicias tan queridas como Mega Man.
Los núcleos tienen un rol importante
Una mecánica importante que nos ayudará a soportar aún más las oleadas de enemigos o hacer más difícil nuestra aventura son los núcleos. En el caso de los núcleos que nos ayudan de forma positiva, podremos equiparnos hasta 3 y sus efectos son temporales, por lo que regularmente tendremos que derrotar oleadas de enemigos para sustituirlos.
Por otra parte, los núcleos que nos afectan de forma negativa pueden disminuir nuestro ataque, entorpecer nuestro campo de visión y deberemos eliminar porque sus efectos son ilimitados.
Apartado visual y sonoro
El videojuego nos presenta una estética anime con diseños que tienen un toque chibi, el cual combina perfectamente con el elenco de voces en japonés. Sin duda alguna, lo previamente es un gran acierto.
Entre las opciones gráficas podremos elegir entre tener una mayor de tasas de FPS o prioridad la calidad y sacrificar la fluidez. Por lo que este juego se adapta a diferentes estilos de juego.
Los efectos musicales y sonoros son geniales, aunque no destacan demasiado, pero son convincentes para pasar un buen rato.
Conclusión
Metallic Child presenta un gameplay simple, pero adictivo y muy convincente para hacerte pasar horas intentando superar las oleadas de enemigos. Por otra parte, creemos que la portabilidad de la Nintendo de Switch le agrega un plus a este juego, ya que permite jugar en cualquier momento y cualquier lugar un juego no tan complejo pero divertido.



