La adaptación al anime de The Beginning After the End (Saikyou no Ousama, Nidome no Jinsei wa Nani wo Suru?) llegó con altas expectativas, gracias a la sólida base de fans de la novela web original y su popular versión manhwa. La historia del Rey Grey reencarnado como Arthur Leywin prometía una combinación épica de fantasía, magia, batallas y crecimiento personal, algo ideal para un anime con ambición. Sin embargo, a medida que se emiten más episodios, queda claro que la animación deficiente está frenando por completo su potencial, esta adaptación está por debajo de los estándares mínimos que los fans esperan.
The Beginning After the End una historia prometedora atrapada en una producción de bajo nivel
Con cinco episodios al aire, The Beginning After the End ha demostrado que cuenta con una narrativa sólida, personajes con potencial y un universo bien construido que despierta curiosidad. Comenzamos con la reencarnación de un rey solitario en un nuevo mundo, su descubrimiento de la magia y su evolución como Arthur Leywin es, sin duda, una historia digna de atención, sin embargo, su mayor debilidad de The Beginning After the End y también la más notoria es la calidad de su animación.
Fans han manifestado su frustración en redes sociales y foros especializados por lo que consideran una producción apresurada y sin cuidado, las críticas más constantes apuntan a que la animación parece depender exclusivamente de keyframes (dibujos clave), con una total ausencia de cuadros intermedios. Esto da como resultado un movimiento entrecortado, artificial y carente de peso, escenas que deberían transmitir energía, tensión o dinamismo se sienten vacías, como si fueran parte de una presentación de PowerPoint disfrazada de anime.
El episodio 5 de The Beginning After the End, titulado La prueba del rey, fue un punto de inflexión para muchos espectadores, y aunque introdujo interesantes desarrollos narrativos, como el conflicto con los elfos, la revelación de que Tessia es una princesa, y el debilitamiento progresivo de Arthur debido a su conexión mágica. Las escenas de acción que debieron ser memorables fueron diluidas por imágenes estáticas y cortes de cámara rápidos diseñados para ocultar la falta de animación real, el combate entre Arthur y Virion, que en teoría debía mostrar un choque de poder y habilidad, fue una decepción.
A pesar de todo, la historia The Beginning After the End sigue atrayendo a un grupo fiel de espectadores, la complejidad emocional de Arthur, influenciado por su vida pasada como el cínico Rey Grey, y su vínculo con personajes como Tessia ofrecen suficiente profundidad para mantener el interés. El conflicto entre razas, la discriminación contra los humanos y el desarrollo psicológico del protagonista aportan capas interesantes, sin embargo, incluso el mejor guion necesita una ejecución visual digna para destacar en un medio audiovisual como este.
Los fans no esperaban que The Beginning After the End tuviera la misma calidad visual de Demon Slayer o Jujutsu Kaisen, pero sí aspiraban a una animación estable y profesional, la decepción es aún mayor porque el contenido de fondo está ahí, el drama, la fantasía y el potencial emocional son genuinos. Pero sin un soporte técnico que lo acompañe, todo queda a medias, a largo plazo, será difícil que nuevos espectadores se sumen si cada escena de acción que debería ser un gancho visual, resulta en un fiasco.
The Beginning After the End gira en torno a Arthur Leywin, quien en su vida anterior fue el Rey Grey, un monarca poderoso, pero solitario, tras una muerte misteriosa, despierta como un bebé en un continente mágico llamado Dicathen. A pesar de su nuevo comienzo, Arthur conserva su conciencia y conocimientos del pasado, lo que le otorga una ventaja significativa mientras crece, a medida que pasan los años, comienza a aprender magia, desarrollar habilidades de combate y descubrir su verdadero propósito en esta nueva vida.
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