Este capítulo de Fumetsu no anata e, o To Your Eternity, nos muestra que los lazos familiares no siempre son de sangre y que la apariencia de alguien puede ser una ventaja una sentencia de muerte.
Como siempre, te advierto que encontrarás spoilers del capítulo, el cual lo puedes ver en Crunchyroll todos los lunes, también te invito a que leas la reseña anterior si es que no la has leído. Si más que decir, empecemos
Lo que vimos en el capítulo
Iniciamos con la noticia de que Lyn (la niña que salvó Gugu) se quiere mudar y trabajar en la tienda del viejo licorero; Gugu se pregunta si es un sueño realizado o un martirio para él. Al hablar un poco con la niña, le comenta que la herida que tiene el por accidente no ha sanado del todo.
Así que Gugu le pida un consejo al viejo para poder curar la herida de Lyn, este le dice que su herida ya debió de haber sanado pero el chico le insiste, así que le pide que se siente y es entonces que le quita un tapón de la cara y le saca licor del interior.
Gugu, desconcertado le exige explicaciones al viejo y este le confiesa que, cuando le intentaba salvar la vida, añadió un órgano que fabrica licor de alta calidad. Gugu, impactado por lo que tiene dentro, huye de la casa con la esperanza de que alguien vaya a buscarlo.
Pero nadie lo busca, así que decide recuperar su antigua vida, va con su exjefe a recuperar su trabajo y vuelve a la carpa que tenía como hogar. Poco a poco intenta volver a aquel pasado donde era una persona norma.
Fumetsu no Anata e nos recuerda que el pasado no se pude recuperar
Lo malo del pasado es que nunca vuelve y Gugu lo aprende de la peor manera; a pesar de que recupera su antiguo trabajo y que su jefe lo quiere como si fuese parte de su familia. La realidad es que no puede encajar en una sociedad donde lo raro o lo feo es motivo de exclusión.
A pesar de haber “aceptado” su nueva forma y recuperar un poco de esa fuerza que tenía antes para sobreponerse a la situación. Termina sin empleo, con hambre y sin un lugar a donde regresar; en su desesperación recuerda que todavía tiene el anillo que le dio Lyn como agradecimiento por haber encontrado a su perro.
Decide vender el anillo, pero al momento de hacerlo se retracta y sale corriendo del lugar ya que es el ultimo recuerdo que tiene de su vida pasada. Mientras huía, se encuentra con su hermano en un estado deplorable. Gugu le da el anillo y se despide de él diciéndole “yo no tengo ningún hermano mayor”.
Vuelve a la carpa para descansar y es entonces que dos sujetos lo secuestran para hacer dinero fácil con él. Afortunadamente aparece Inmo para protegerlo, a pesar del miedo que tiene al bosque.
Gugu se da cuenta que su verdadera familia es Inmo; quien afrontó sus miedos y arriesgó todo para poder salvarlo y llevarlo de regreso con los demás. Gugu salta de alegría por saber que si tiene un lugar a donde volver; un lugar al cual llamarle hogar.
Fumetsu no Anata e nos da una visión más amplia del ser humano
este anime nos ha mostrado lo bueno y lo malo de las personas; desde la esperanza y el amor incondicional, hasta el egoísmo y el miedo a lo diferente. En este capítulo nos muestran un poco de esto último.
Lo vemos cuando Gugu se quita la mascara en frente de la familia de su jefe y cuando va por el mercado caminando sin su mascara. La gente se aterra al ver su cara y algunos salen corriendo al verlo.
Como diría Shrek «lo juzgan sin siquiera conocerlo». Pero esto, hasta cierto punto, es normal ya que la evolución nos puso ese reflejo en el disco duro genético para evitar ser la cena de algún depredador.
Conclusión
Cada capitulo es mejor que el anterior; el formato de mini historias (del cuál ya hablé en reseñas anteriores) que a muchos no les gusta. A mi parecer, es el punto más fuerte que tiene este anime, además de que se complementan entre si, ya que forma una historia central.
Cada historia nueva nos trasmite algo diferente y, al igual que Inmo, aprendemos a que todos esos sentimientos, tanto buenos como malos, forman parte de la personalidad de cada uno. 
En lo personal, creo que este tipo de temáticas se deben de tocar más en las obras artísticas de entretenimiento. Porque cada año que pasa, el ser humano se va haciendo menos humano y si es que no hay un regreso a los principios que le dieron forma a la sociedad puede que esta cambie para mal o desaparezca por su propia mano.
Pero bueno, creo que ya se me está saliendo el hippie que llevo dentro así que hasta aquí dejaré la reseña de esta semana. Te recuerdo que puedes votar por Fumetsu no anata e dando CLIC AQUÍ y así llegue a los primeros puestos de popularidad.
Dinos abajo en los comentarios que te está pareciendo este anime, ¿Estás de acuerdo con esta reseña? Tu opinión es la más importante en ANMO. Sin más me despido, mi nombre es Alexis y te recuerdo, como siempre, que tenemos una cita para la siguiente reseña
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