La segunda entrega de Kimetsu no Yaiba: The Hinokami Chronicles llega con el objetivo de consolidar a Kimetsu no Yaiba como una franquicia estable dentro del género de lucha anime. Aunque su propuesta sigue siendo accesible y visualmente espectacular, esta secuela se esfuerza por ofrecer más contenido y modos de juego que la anterior, sin alejarse demasiado de la fórmula establecida. Desarrollado por el estudio japonés CyberConnect2 y distribuido por SEGA, ¿podrá superar lo que inició su antecesor?
Kimetsu no Yaiba está de regreso
Tras el recibimiento de Kimetsu no Yaiba: The Hinokami Chronicles en 2021, un juego que si bien fue limitado en modos ofrecía una recreación visual impecable del anime, CyberConnect2 regresa con una secuela que busca expandir esa fórmula. The Hinokami Chronicles 2 se presenta como una continuación directa tanto en lo narrativo como en lo jugable, conservando el estilo accesible de combate, pero añadiendo más personajes, nuevos modos y un recorrido por algunos de los arcos más intensos de la serie. Aunque no rompe con las bases del original, intenta afinar su propuesta para entregar una experiencia más completa para los fans.
Es notorio el avance y el feedback que recibió el estudio tras las críticas al primer juego, ya que se percibía como bastante carente de contenido y alma. Se sentía más bien como un pretexto para introducir al popular anime dentro de un mercado tan grande como los videojuegos. Pues esto no parecer ser el caso. Kimetsu no Yaiba: The Hinokami Chronicles 2 brilla con luz propia gracias a su extensa plantilla, lo visualmente hermoso que es, y su divertida historia, apegada completamente a los visto en los recientes arcos de la animación japonesa.

Historia: del Distrito Rojo al Castillo Infinito
La campaña principal retoma la historia justo donde se quedó el primer título. Se cubren los arcos del Distrito del Entretenimiento, la Aldea del Herrero y el Entrenamiento de los Hashira. El juego está dividido en 8 capítulos, donde deberás atravesar por lo ya visto en el anime. El objetivo de cada misión será llegar a combatir con los ya conocidos jefes finales. Habrá misiones secundarias en todos los capítulos, sin embargo, rara vez aportan algo significativo a la experiencia.
Eso sí, el estudio tuvo mucho cuidado en la introducción de las cinemáticas, puesto que están muy bien logradas y capturan la esencia dramática de la serie. Pero una vez más, CyberConnect2 peca de lo que se la criticado constantemente en los juegos que desarrolla. La narrativa está construida a través de estas constantes cinemáticas que acompañan entre cada capítulo y después de cada pelea importante, y le resta importancia a construirla mediante el gameplay y la exploración.

Gameplay: lo más jugoso de Demon Slayer
El sistema de lucha se mantiene fiel a lo planteado en el primer juego: combates en tercera persona en entornos cerrados, con dos personajes por equipo y un esquema de control sencillo basado en ataques ligeros, pesados, especiales y una técnica definitiva. El ritmo es rápido, y todo está diseñado para que incluso quienes no están familiarizados con los juegos de pelea puedan disfrutarlo. El estudio demuestra maestría una vez más en el desarrollo de juegos de pela basados en un anime.
La dificultad es otro punto a destacar en esta historia de Kimetsu no Yaiba. En el modo Historia no es posible alterar la dificultad, por lo que enfrentar retos mayores como los jefes finales, le da un toque divertido. No resulta excesivamente difícil para los veteranos, pero si eres un novato en este tipo de títulos, puede que te cueste un par de intentos más terminar con las batallas.
Otro de los cambios más notorios es la inclusión de un sistema de equipamiento llamado Gear, que permite modificar ligeramente el rendimiento de los personajes en combate. Se pueden llevar hasta tres objetos que influyen en estadísticas como la regeneración de energía, la resistencia al veneno o la velocidad de recuperación. Aunque el sistema no transforma radicalmente la experiencia, sí añade un toque de estrategia a la selección de personajes y a la preparación para ciertos retos.

Nuevos modos
Además, se incluyen nuevos modos que alargan la vida útil del juego. El más destacado es Training Paths, un modo por etapas con estructura semirroguelike, donde se enfrentan distintos desafíos con condiciones específicas. Aquí se desbloquean recompensas estéticas y mejoras que incentivan la repetición. Otro añadido es Path of a Demon Slayer, que permite revivir combates clave del primer juego sin necesidad de volver a recorrer toda su historia, lo cual es ideal tanto para quienes no jugaron el original como para quienes quieren revivir ciertos momentos.
A pesar de contar con estos nuevos modos, la historia principal es relativamente corta si te centras únicamente en las misiones principales. Con una duración aproximada de entre 6 a 8 horas, contando las numerosas cinemáticas. Esto no quiere decir que sea algo necesariamente malo. Es una historia que retrata lo visto en el anime que va al punto. Pero la duración de Kimetsu no Yaiba: The Hinokami Chronicles 2 resulta incalculable al ser un título enfocado en las peleas. Sobre todo considerando que posee modos de combate locales y en línea.
Otro de los aspectos que lo convierten en un título rejugable es la posibilidad de aumentar de nivel a los personajes, lo que a ojos de las personas completistas se vuelve atractivo. Además, podrás desbloquear elementos estéticos que te incentivan a seguir explorando el juego más a fondo.

La enorme plantilla en Kimetsu no Yaiba: The Hinokami Chronicles 2
El plantel de personajes es considerablemente más amplio que en la entrega anterior. Los nueve Hashira ya están disponibles, junto con otros personajes emblemáticos de Kimetsu no Yaiba. Este aumento en la variedad de estilos y habilidades contribuye a que las partidas en modo versus resulten más dinámicas, aunque el balance aún puede afinarse.
Una de las principales quejas del primer título era lo limitado de su plantel. Esta vez, el roster inicial incluye más de 40 personajes, con los nueve Hashira disponibles desde el principio, además de variantes de los protagonistas y varios antagonistas importantes. Cada personaje cuenta con sus propias técnicas y animaciones finales, lo que ayuda a diferenciar estilos de combate y aporta variedad en las partidas versus.
No obstante, aunque la diversidad de personajes es bienvenida, el balance todavía presenta altibajos. Algunos luchadores claramente dominan por encima de otros, y en el entorno competitivo más serio esto podría generar frustración. Esto es notorio en la velocidad de reacciones de algunos personajes, como Uzui o Tokito, mientras que otros tienen movimientos más pesados o lentos. Sin embargo, para el público general, el desequilibrio no afecta demasiado y el juego sigue siendo disfrutable en partidas casuales.

Aspecto técnico
Visualmente, el juego basado en Kimetsu no Yaiba se mantiene como uno de los más fieles al anime en cuanto a estilo artístico. El cel shading está bien aplicado, las animaciones de ataque son espectaculares y las escenas clave conservan la atmósfera del material original. Los efectos de partículas, la iluminación y los movimientos especiales aportan un fuerte sentido cinematográfico.
CyberConnect2 tiene bastante experiencia implementando combates sumamente llamativos, en entornos semicirculares, fluidos y con una rapidez impresionante. No hubo caídas de frames o situaciones donde el apartado gráfico tuviera algún defecto, al menos durante las batallas.
Sin embargo, los escenarios de Kimetsu no Yaiba por los que atraviesas durante la corta exploración dejan bastante que desear. Son genéricos, repetitivos y contrastan mucho con lo bien cuidado que están los personajes. Donde sí hubo pop-in fue aquí. A medida que los personajes jugables iban avanzando, era notorio cómo ciertos elementos del mapa resaltaban de forma súbita. Esto puede deberse a cuestiones del motor gráfico, y no entorpece la experiencia de juego, pero es importante mencionarlo en un título donde lo visual es algo fundamental y que está basado en un anime tan popular por el cuidado que se tiene en sus animaciones.

En cuanto al sonido y la música, están presentes piezas que escuchamos en el anime, pero no son algo que destaquen especialmente en momentos de más dramatismo. Tampoco la mezcla de sonido en los combates es algo que permita acrecentar la emoción en los mismos. Por otro lado, es agradable y entrañable escuchar a los actores y actrices de voz originales.
Conclusión de Kimetsu no Yaiba: The Hinokami Chronicles 2
En términos generales, Kimetsu no Yaiba: The Hinokami Chronicles 2 es un título que entrega exactamente lo que se espera de él: una experiencia visualmente impactante, accesible y centrada en revivir momentos clave del anime. No es un juego de lucha profundo ni busca serlo. Es, ante todo, una celebración interactiva de la obra de Koyoharu Gotouge y de la adaptación hecha con maestría por el estudio Ufotable. Para fans de la serie, resulta una experiencia disfrutable. Para quienes buscan un sistema de combate complejo o una narrativa más ambiciosa, puede quedarse corto.

